miércoles, 29 de agosto de 2012

La ignorancia científica española

Suspenso sin paliativos en cultura científica, sólo así se pueden calificar los resultados de un reciente estudio de alcance internacional que pone de manifiesto el vergonzoso nivel científico de la población española comparado con otros países desarrollados de nuestro entorno.

Si observamos el siguiente gráfico con detenimiento, en él no veremos información relacionada con la corrupción, con la economía sumergida o con la prima de riesgo, y sin embargo a grandes rasgos ilustra con sorprendente cercanía la salud económica del continente europeo, dejando claramente descolgados a Italia, España y Polonia respecto al resto de países. Los datos mostrados corresponden a un estudio realizado por la Fundación BBVA cuyo objetivo es evaluar el grado de conocimiento científico de la población europea y estadounidense.

 

No debería sorprendernos la relación existente entre la educación y la prosperidad, y algo similar debería decirse sobre el conocimiento científico. Una sociedad que promueve la ciencia y el método científico genera ciudadanos con espíritu crítico y pensamiento racional. Y esa racionalidad es el mejor forma de detectar y rechazar la demagogia o la manipulación, y en general todas las prácticas que sacan partido de la ignorancia y falta de espíritu crítico de la gente. No es casualidad que los países con mayor cultura científica funcionen también mejor a nivel social y político.

Vamos a detenernos con mayor detalle en el estudio, porque ciertamente no tiene desperdicio. Entre otras muchas "joyas" descubrimos que más del 75% de los españoles piensan que “los antibióticos destruyen los virus” o que aproximadamente la mitad cree que “los primeros seres humanos vivieron al mismo tiempo que los dinosaurios”. Aunque personalmente lo más impactante y sangrante es que prácticamente la mitad de los españoles no sean capaces de nombrar un solo científico relevante.


Fuente La Vanguardia
DETALLE Y DATOS OBJETIVOS SOBRE EL ESTUDIO

Los ciudadanos se sienten más interesados que informados en los temas científicos

El nivel de interés declarado por las noticias relacionadas con los temas científicos tiende a ser medio-alto. Sin embargo, ese interés no se traduce automáticamente en un nivel de información similar. Esta distancia se observa en casi todos los países, y es aún más marcada en España.


El principal canal de información sobre temas de ciencia es la televisión y en segundo lugar, el periódico. En el  seno de Europa, es mayor en Dinamarca, Reino Unido y Países Bajos. España destaca como uno de los países europeos que menos se informa sobre este tipo de noticias. Tanto en la media de países europeos incluidos como en España y Estados Unidos, los hombres siguen en mayor medida contenidos científicos a través de la web que las mujeres. La frecuencia al uso de la red para buscar este tipo de información se incrementa claramente a medida que disminuye la edad. El nivel de educación constituye la variable que más diferencia el seguimiento de este tipo de información a través de Internet, aumentando a medida que se incrementa el nivel de estudios. 


Los hombres, los adultos jóvenes y, más marcadamente, la población con mayor nivel de estudios, son quienes mayor vínculo tienen con la ciencia

Dentro de Europa, los daneses son quienes conversan más frecuentemente sobre estos temas (el 50% expresa hacerlo “muchas veces” o “bastantes veces”). Los españoles se sitúan en el otro extremo, sólo el 15% de los españoles declara conversar con mucha o bastante frecuencia sobre temas de ciencia, frente al 27% en la media europea. 


Dentro de Europa, el porcentaje de población con un nivel alto de cercanía se incrementa claramente en Dinamarca, Países Bajos (cercano al 40%), seguidos de Reino Unido, Francia y Alemania (cercano al 30%) mientras que no llega al 15% en República Checa, España e Italia. Asimismo, mientras que cerca del 40% en República Checa, España e Italia no han tenido vínculo alguno con la ciencia, sólo el 10% de los daneses y holandeses se encuentran en esta posición

La distancia entre el nivel de conocimiento científico de los españoles y la media europea es mucho más importante entre los adultos mayores que entre los jóvenes: el segmento con nivel bajo de conocimiento entre los jóvenes españoles es de un 13% frente al 10% de los jóvenes de la media europea, mientras que este segmento alcanza al 57% de la población de adultos mayores españoles frente al 22% de los adultos mayores en la media europea. 



La educación marca diferencias en el nivel de conocimiento en España: aproximadamente el 44% de la población con menor nivel de estudios tiene un nivel bajo de conocimiento científico frente al 6% de la población con mayor nivel de estudios. 

Diferencias entre países en el nivel de conocimiento objetivo

En la parte más alta del mapa de conocimiento se sitúan Dinamarca, Países Bajos, Alemania y República Checa; en la parte media se colocan Austria, Reino Unido, Francia y Estados Unidos; y en la parte más baja, Polonia, Italia y España. Los ciudadanos de España son los que obtienen una media de conocimiento objetivo más bajo.





Familiaridad con grandes científicos

La dificultad para identificar un científico de renombre es similar en la media europea y en Estados Unidos (27%), incrementándose significativamente en España (46%), seguida de Italia (31%), Reino Unido (27%) Polonia (26%) y Francia (25%). En el resto de los países en torno al 20% no ha podido nombrar ningún científico, porcentaje que es algo más bajo en Dinamarca (15%) 


CONCLUSIONES

¿Qué implicaciones tienen estos resultados?


Desgraciadamente el estudio que estamos detallando en esta entrada no se trata de un caso aislado, otro similar realizado en 2009 llegaba a la conclusión de que más de un tercio de los españoles (34,2%) viven en un universo precopernicano y piensan que el Sol gira alrededor de la Tierra, diferentes preguntas, similares conclusiones... 



Debemos mirar más allá de estos datos, más allá de la -triste- anécdota, no se trata sólo que gran parte de los españoles no sabe algo tan básico como que la Tierra gira alrededor del Sol. Si el español promedio tiene ese tipo de lagunas. ¿Esa misma persona va a poder decidir con criterio y conocimiento de causa sobre asuntos más complejos?, ¿son esas personas capaces de tener una postura sobre el cambio climático o sobre la política energética y las energías renovables?.

La ignorancia sobre la ciencia es peligrosa. Una sociedad desarrollada debería ser capaz de entender y cuestionar decisiones, altamente técnicas a veces, que toman tanto gobiernos como organizaciones internacionales. El fomento de la cultura científica además es una de las claves a la hora de configurar una sociedad más innovadora y más próspera, en definitiva, una sociedad más culta.

Desgraciadamente España es un país en el que es mucho más probable que una persona elegida al azar en la calle conozca al personaje más irrelevante de la crónica rosa antes que a Nikola Tesla, y ese analfabetismo científico es un grave problema que deberíamos revertir entre todos. No es sólo es una cuestión de los estamentos educativos (que ciertamente tienen mucho que mejorar), es una labor de la sociedad en su conjunto ya que como acertadamente dice un proverbio africano "para educar a un niño hace falta una tribu entera". Todos somos responsables de la educación de las personas que se crían en nuestro grupo social como bien saben en Escandinavia, desde la familia  (El 55% de los finlandeses cree que la familia es más responsable que la escuela de la educación de sus hijos. En España el 15%) hasta los medios de comunicación. Es simplemente inaceptable que el 46% de los españoles no pueda identificar a ningún científico destacado, es muy complicado que un país prospere cuando la mitad de sus ciudadanos muestra un grado de ignorancia tan sangrante.

Si queremos ver el lado positivo de todos los datos que hemos mostrado lo tenemos que encontrar en términos generacionales, es decir, los más jóvenes están acortando distancias con Europa: la distancia entre el nivel de conocimiento científico de los españoles y la media europea resulta mucho más atenuada entre los jóvenes: el segmento con nivel bajo de conocimiento entre los jóvenes españoles de 18 a 24 años es de un 13% frente al 10% de los jóvenes de la media europea, mientras que este segmento alcanza al 57% de la población de adultos mayores españoles frente al 22% de los adultos mayores en la media europea. Eso manifiesta una tendencia de mejora (todavía insuficiente).



Y es que para explicar nuestro presente es necesario mirar también hacia nuestro pasado, no podemos olvidar que España partía en el siglo XX con un lastre educativo muy acusado respecto al resto de Europa Occidental, hasta la década de 1980 los porcentajes de alfabetización en España no superaron el 95 %, cifra que los países europeos más avanzados ya habían alcanzado treinta o cuarenta años antes. Pese a la mejora educativa de las últimas generaciones, esa desventaja todavía hoy es visible y cómo manejemos de aquí en adelante ese déficit tendrá mucho que ver en nuestro futuro como país.

Fuentes: FBBVA, magonia, elpais